La verdad que tengo bastante suerte con respecto a mi horario porque es muy flexible. Si miramos el contrato trabajo 8 h al día pero es verdad que hay veces que algunos protocolos de los que realizamos son largos y puedo trabajar hasta 11-12 h al día. Sin embargo, también hay otros días con pocas cosas que hacer y que me puedo ir antes de lo normal si lo necesito. Puedo planificarme como considere mejor.
Además, en mi laboratorio tenemos un lema… De lunes a jueves, trabajamos las horas que haga falta, pero el viernes, si no hay causa de fuerza mayor, nos vamos a comer a casa… Así empezamos antes a disfrutar el fin de semana 🙂
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